GRACIAS A DIOS


Gracias
a Dios
no eres sirena
y tienes pies para bailar
y piernas para abrir a los hermosos.
La rosa eléctrica
y el tren que colisiona con el barman.
El whisky con sabor a ira.
Los guantes de boxeo.
La Biblia sin leer.
La luna,
hija del diablo.
La bola de billar número 2,
azul
como la hierba de la Atlántida.
Petrarca en calzoncillos.
El pan
de cada noche, amor.
El manicomio del jinete en llamas.
Y yo, que mataré
por ti
como matan los osos... ¡abrazando!

INMORTAL


Cuando fui niño
empapelé la pared de mi habitación
con dibujos de Mickey Mouse.

Cuando fui adolescente
empapelé la pared de mi habitación
con pósters de Marilyn Monroe.

Cuando fui adulto
empapelé la pared de mi habitación
con versos de Walt Whitman.

Cuando fui viejo
empapelé la pared de mi habitación
con mantras de Buda.

Ahora soy inmortal: la pared es mi rostro.

EL POETA ESTÁ TRISTE


El poeta está triste.

Ama el amor,
el pan
silvestre,
el rock
sin riendas...

Vivir
en la ciudad...
¡y todo para nada!

El poeta está triste:
no hay ascensor,
joder,
       n
       o

       h
       a
       y

       a
       s
       c
       e
       n
       s
       o
       r
       que suba hasta las tetas de la luna.