GÉNESIS DE LA FIESTA

                        a Pablo Calvo Álvarez

He aquí el Edén, Eva bebiendo alcohol,
mujer fatal, la reina de la barra,
el tanga del amor, hoja de parra,
tatuado en el ombligo, un caracol.

La negra harley davidson al sol,
Adán, barro rebelde, ángel macarra,
un cigarrillo en boca, una guitarra,
en el principio era el rocanrol.

No muerdas la manzana del reproche,
el mundo está bien hecho, qué placer,
la ley es la no ley, ¡viva el derroche!

Eternamente, hoy, mañana, ayer,
felices en el pub, sábado noche,
bailando Dios, bailando Lucifer.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

solo los caracoles saben del placer,
joder que potencia Oscar, con este poema prometo acostarme,
y follarmelo solo diez o doce veces cada noche, sin piedad alguna,
palabra.

Noé Ortega dijo...

Qué bueno el Génesis, verdad? Qué triste, vivir en el paraíso como adormilados, en una nube de inconsciencia, qué triste no desear a los cuerpos, no sentir el pudor que es la antesala del deseo desatado, la hoja de parra que nos tapa para después ser destrozada con frenesí. Gracias, serpiente. Gracias, manzana. Gracias, mujer.