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PERO LA LIBERTAD CONSISTE EN EL ORGASMO

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......Como mi admirado David Vegue, metamístico y misticometa, conozco al menos 14 idiomas: el castellano, el corazón, la belleza, el agua, la ceniza, el horizonte, el fútbol, la paternidad (=la inmortalidad), la poesía, el silencio, los girasoles, los caballos, la imaginoflexia y el rock. El idioma francés, sin embargo, escapa a mis dominios. Siguiendo a Horacio, acepto este límite, que ya jodió de raíz algún que otro ligue en mi adolescencia, cuando mi familia acogía temporalmente muchachit@s pirenaic@s en casa. El chico de los Chico, José Manuel, ha colgado en su naciente blog, La memoria de Udnie, un fragmento de entrevista a Jean Paul Sartre. Gracias a Dios o a la Virgen -últimamente no sé a Quién agradecer tanto milagro en mi vida-, está subtitulado. Aprovecho la traducción y la frontera mágica entre los dos idiomas para celebrar lo insólito. Vayan a este punto, el minuto dos/segundo cincuentaiséis (2´56´´) y lean al tiempo que escuchen. El filósofo dice literalmente: "Pero la libertad consiste en el compromiso. El compromiso, transformándose en práctico-inerte, es lo que yo quise, lo que no quise, lo que querré". Eso sí, también dice, literariamente, pues el idioma de Cervantes permite esta dulce travesura: "Pero la libertad consiste en el orgasmo. El orgasmo, transformándose en práctico-inerte, es lo que yo quise, lo que no quise, lo que querré". Como felicísimo broche, confundiendo nuevamente lectura y escucha, en el minuto cuatro/segundo nueve (4´09´´), tenemos: "Entonces, desde el momento en que la libertad es el orgasmo, el final del orgasmo es la desaparición de la libertad. Sólo que en ese momento se ha completado una vida". Amén. Buenos días a nadie. Buenas noches a todos. Sean libres.