SONETO GÓTICO

...............................a Victoria M. Pérez Mateos, en memoria


Las quinceañeras, que odian a sus padres
porque entorpecen el primer amor
con brújulas y horarios, oyen heavy,
descalzas en el bus, de vuelta a casa.

Las quinceañeras, que jamás sonríen
al búho desplumado del jardín,
seducen a satán, ángel del no,
quemando sus cabellos con cerillas.

Las quinceañeras, que dibujan lobos,
arrojan a la luna el pintalabios,
destrozan los espejos a pedradas.


Las quinceañeras, que no leen poesía,
con arte se suicidan en la ducha
y flotan como patos amarillos
.

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1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, Óscar.

Cómo me gustan tus cisnes negros. Compartimos el amor por lo insólito como esa chica a la que le dedicas el poema, me parece que se salvó y se convirtió en maestra de submarino. Gracias por imaginar copulando a Ludwig y a la virgen de los que miran a los lados y solo encuentran nada. Maravilla de oda a la nada, se masca el misterio. Pase lo que pase (y no en todas las circunstancias) que siempre haya un acorde sostenido. non-stop-misterio. Confío en que ese único y verdadero dios de los orgasmos te conceda, siempre a través de tí, la buena nota y el buen corte.

Me alegraste la tarde con aquel paseo estático. Que bien ver buena gente.

Pablo